martes, 30 de julio de 2024

La distancia: la cápsula de cine de Macaco y Rozalen


La distancia dirigido por Macaco y Bernat Saumell es un cortometraje inspirado en decenas de películas románticas que finalmente desembocó en un videoclip musical interpretado por el propio Macaco y por la artista española Rozalen.

 Con esta publicación me despido hasta el mes de septiembre para seguir dando rienda suelta a las críticas marcianas. ¡Feliz mes de agosto!

❤️❤️❤️❤️❤️


Hoy, en Curiosidades de cine, he querido rescatar un videoclip musical en forma de cortometraje para poner en valor estas pequeñas muestras audiovisuales. A veces, las mismas, llevan más cine dentro que muchos de los estrenos que llegan a las salas.

Los actores Jon Arias y Alba Ribas son los protagonistas. Hablamos de una pareja que mantiene una relación a distancia y que utilizan las nuevas tecnologías para reducir esa distancia de alguna manera. 

La balada, según la especialista musical Sandra Pérez: "Cuenta con unos acordes que la asimilan a un bolero antiguo, a otra época; además de una sensación de melancolía, muy favorecida por las cuerdas y el piano. Ambos artistas grabaron esta versión en acústico, con final en la que suenan solo dos voces desnudas, casi susurradas y sin instrumental".

Sin extenderme más, dejemos que hoy las imágenes, la letra de la canción, y la música sean las protagonistas. 

A menos de un centímetro

A casi un milímetro

Extraña distancia

Que no logro reducir

Tan cerca de tus labios

Lejano espacio

Que no puedo conquistar

Por mucho que me acerco a ti

A diez metros te intuí

A cinco, te vi sonreír

A un metro hablamos

A veinte centímetros me enamoré de ti

Distancia absurda

Fue más fácil llegar a la luna

Dos cuerpos paralizados

Dos labios que no se llegan a unir

Me acerco, me acerco y no puedo llegar a ti

Tan lejos, tan cerca, una distancia que no logro reducir

Me acerco, me acerco y no puedo llegar a ti

Tan lejos, tan cerca, dos labios que no se llegan a unir

Me acerco, me acerco, me acerco

Sentí tu respiración

Se acelera el corazón

Mi piel pertenece a la tuya

Porque tú la erizas, mi amor

Los ojos no pestañean

El tiempo no se balancea

Hierve la sangre, un susurro en la oreja

A medio milímetro de tu amor

En un tiempo récord

Me planté en tu mundo

Pero por mucho que lo intento, me quedo mudo

No logro cruzar ese muro

Espacio incierto

Donde no sopla el viento

Soy un número entero

No logro llegar a ti al punto cero

Me acerco, me acerco y no puedo llegar a ti

Tan lejos, tan cerca, una distancia que no logro reducir

Me acerco, me acerco y no puedo llegar a ti

Tan lejos, tan cerca, dos labios que no se llegan a unir

Me acerco, me acerco, me acerco 

Recorreré tu cuerpo 

Te amaré desde lejos

Distancia negativa 

Sería positiva si estuvieras junto a mí

Sentí a kilómetros 

Que te quería a centímetros de mí

Sentí a kilómetros 

Que te quería a centímetros de mí

Me acerco, me acerco, me acerco

¡Hasta septiembre!

martes, 23 de julio de 2024

Nuestro momento perfecto: oda al romance clásico

Nuestro momento perfecto dirigida por Aylin Tezel se ha estrenado en cines españoles el día 17 de julio de 2024. La cinta ha obtenido el prestigioso premio Fipresci en el Tallinn Black Nights Film Festival.

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La historia: Kira e Ian, dejando ambos atrás sus vidas y sus problemas, se encuentran durante un fin de semana de invierno en la isla escocesa de Skye. Su conexión es instantánea y profunda. De regreso a Londres, cada uno intenta seguir con su vida, pero deberán enfrentarse a su pasado antes de volver a encontrarse.

La crítica: La directora Aylin Tezel afronta con soltura su ópera prima detrás de la cámara, y no sólo dirige, sino que también da vida con gran intensidad al personaje femenino protagonista. El propio relato es una declaración de amor al romance clásico que nace de un encuentro inesperado y alejado de las nuevas tecnologías. 

Nuestro momento perfecto busca realizar un homenaje hacia el amor universal aunque también muestra como pueden ser de liquidas las relaciones amorosas en pleno siglo XXI. La cineasta nos habla un poco de todo en este sentido y se pregunta dos cuestiones básicas: ¿Cómo utilizamos el tiempo que nos es dado? ¿Y cómo incide la forma en que nos enseñan a amar en nuestro paso por el mundo?

La cinta tiene un inicio potente cuando Kira e Ian se conocen por pura casualidad. Hay vitalidad, alegría y sueños. De igual manera y cerrando el círculo de manera virtuosa hallamos un final muy bien elaborado. El principal problema del filme es lo que se narra -y es casi todo el metraje- entre estos dos momentos señalados. Si bien es cierto que conocemos a los dos protagonistas, sus otras relaciones y sus traumas, el relato se hace sombrío y elitista con gente que parece fuera de la sociedad actual. 

Kira e Ian son el núcleo y el corazón de esta película. Sus historias son personales e individuales, pero las cuestiones sobre la vida y el amor que presenta esta película son universales. Todos conocemos el deseo o la nostalgia de un amor o de un hogar, el dolor de la pérdida y el miedo de lidiar con traumas de nuestra niñez o adolescencia; el poder liberarnos de los fantasmas de nuestro pasado.

Las interpretaciones de Aylin Tezel Chris Fulton son buenas destilando buena química en pantalla. Sus personajes están perdidos en esa frontera entre los 30 y los 40 años en los que aún no han encontrado ni el amor, ni su trabajo deseado e incluso sus relaciones familiares se encuentran nubladas por su propio ego. Poco a poco evolucionan como individuos y comenzarán a valorar a sus propias familias, a ellos mismos e incluso a las otras parejas que pasaron por sus vidas. 

Otros dos personajes principales de la historia son la isla escocesa de Skye y la metrópolis de Londres, dos lugares que reflejan el deseo sereno y la disrupción ruidosa de Kira e Ian. La gente de la isla de Skye tiene su propia forma de vida, su ritmo propio. Los padres de Ian viven su aislamiento y reaccionan a los traumas familiares sin palabras; su casa es silenciosa. La naturaleza, por su parte, es poderosa y omnipresente. Londres presenta un contraste fuerte: una capital pulsante dividida política, cultural y espiritualmente. Es rápida, jadeante, desenfrenada, y donde es fácil perderse en esa corriente anónima. Kira e Ian tratan de encontrar un hogar en esa ciudad que no tiene nada que ver con sus raíces. Londres les rechazará a ellos y a sus sueños al inicio, y sin embargo seguirá siendo el lugar que les da esperanza de encontrarse cuando más perdidos están. Los colores y la música son también importantes en esta película, ya que crean el lenguaje con el cual los protagonistas se expresan.

Nuestro momento perfecto es una cinta que trata de hacer una reflexión general de cómo son las relaciones amorosas en la actualidad. Se percibe una fuerte crítica al daño en la autoestima que se producen en las aplicaciones de citas y en la selva de las redes sociales. Por tanto hablamos de una oda al romance clásico, pero adaptándolo a los usos sociales de nuestro tiempo. La maternidad, base de la vida, apenas es mencionada e incluso se ve como una rara ávis entre quienes optan por ser padres. La cineasta ha querido mostrar como son las primeras 24 horas que pasan juntos Kira e Ian y su intensidad. No solo porque están compartiendo uno de los momentos más vulnerables de la vida de Ian, sino también porque su relación pasa de un coqueteo pasajero a una conexión real en el espacio de una noche. A medida que les seguimos en sus vidas diarias individuales, después del día que se conocieron vemos cómo tras volver a sus vidas se echan de menos. En definitiva, tengo la sensación de que la película se ha planteado con un comienzo trepidante y con un final bien trenzado, pero con la pega de que la parte central del relato se hace demasiado parsimonioso. Es por ello que el grueso de la narrativa resulta grisácea y repetitiva lo que no menoscaba la buena conclusión que une al amor con la libertad. Algo que el ser humano más posesivo no parece acabar de comprender. 

 Nota: 6/10. 


Nacionalidad: Alemania, Reino Unido 

Título Original: Falling Into Place

Género: Drama romántico

Dirección: Aylin Tezel

Guion: Aylin Tezel

Música: Jon Hopkins

Fotografía: Julian Krubasik

Duración: 113 minutos

Reparto: Aylin Tezel, Chris Fulton,
Rory Fleck-Byrne, Alexandra Dowling

martes, 16 de julio de 2024

Fly me to the Moon: distendida versión del viaje a la Luna


 Fly me to the Moon dirigida por Greg Berlanti se ha estrenado en cines el día 12 de julio de 2024. Protagonizada por Scarlett Johansson y Channing Tatum, la cinta es una comedia dramática ambientada en el histórico alunizaje del Apolo 11. 

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La historia: Llamados para mejorar la imagen pública de la NASA, las chispas vuelan en todas las direcciones cuando la prodigio del marketing Kelly Jones (Johansson) causa estragos en la ya difícil tarea del director del lanzamiento Cole Davis (Tatum). Cuando la Casa Blanca considera que la misión es demasiado importante para fracasar, Jones recibe la orden de simular un alunizaje falso como respaldo, comenzando la verdadera cuenta atrás...(Sony Pictures).


La crítica: Si en Figuras ocultas se abordaba el trabajo de la mujer en la carrera espacial y en Space Cowboys se fantaseaba con un viaje de unos veteranos a la Luna -también sonaba en su magistral final el Fly me to the Moon en la voz de Sinatra-, en la película hoy reseñada el guion se centra en realizar una ficción histórica que juega con gracia con una de las versiones conspiranoicas. Se trataba de crear un plan B televisivo para que en caso de fracaso de la misión, se emitieran imágenes pregrabadas en un plató con los astronautas pisando el satélite. 

La NASA se estaba preparando para llevar a cabo el sueño del difunto presidente Kennedy, llegar a la Luna, y la responsabilidad recae sobre Moe Burkus, un "fontanero" del Gobierno que piensa que los ciudadanos necesitan una nueva visión del programa espacial. Y es entonces cuando consigue llevar a Kelly hasta Florida para venderles a todos la misión a la Luna. Aquí nos encontramos con la parte más potente del filme. Se da un recital de lo que es el marketing masivo e incluso una clase maestra de esta especialidad en los primeros 30 minutos de metraje. 

Fly me to the Moon ha tenido el privilegio de recibir el apoyo de la NASA, quien les ha puesto en contacto con varios técnicos que estuvieron en activo durante los lanzamientos de los Apolo. Sería normal pensar lo difícil que sería obtener la cooperación de la agencia espacial en una película que muestra a un personaje oscuro del gobierno de Estados Unidos cuyas órdenes son rodar un alunizaje ficticio. Hay gente que todavía cree en esa teoría de la conspiración, aun teniendo una sobrecogedora cantidad de pruebas que demuestran que el ser humano sí llegó a la Luna. Y ahí está la gracia y la paradoja del filme: va a aumentar las teorías de la conspiración, pero a su vez con Scarlett Johansson como protagonista y productora -y casi directora- la NASA recibirá publicidad gratuita y se recobrará el interés por el espacio con Marte en la brújula. 


Como decía antes, Scarlett se ha buscado un papel que le viene como anillo al dedo y nos deja una gran interpretación como es habitual. Su personaje es brutal: Kelly es una vendedora cínica, una experta en marketing y publicidad de Manhattan. Ella entra como un huracán en las instalaciones de la NASA y convence a senadores, técnicos y marcas publicitarias para seguir invirtiendo en la conquista lunar. Como director del lanzamiento está Channing Tatum que hace todo lo posible por cargarse la película con su pésima interpretación. Inexplicable elección del protagonista. Creo que Joe Biden lo hubiera hecho mejor. Sin embargo, Woody Harrelson nos congracia con el arte de la interpretación con ese personaje salido de las cloacas y que cuando comparte pantalla con Johansson es un verdadero goce.

Uno de los mayores retos técnicos del filme ha sido la recreación de la sala de control, el espacio donde los ingenieros de Cape Kennedy orquestaron el lanzamiento del Apolo 11. Se han usado decorados enormes para que los espectadores sientan la magnitud de la narración, desde la sala donde lanzan los cohetes hasta la mismísima superficie de la Luna. Otra característica a destacar es el vestuario típico de aquella época. Johansson con su increíble estilo años 60, Tatum con los suéteres mod y Harrelson con los típicos trajes del personaje siniestro al que interpreta. Respecto a la música tenemos jazz, música clásica de orquesta, música típica americana y todos esos sintetizadores de cuando llegamos a la Luna. 

Fly me to the Moon es una cinta distendida, amena y evasiva que trata de emular a las ingeniosas comedias de Katherine Hepburn y Spencer Tracy, pero con el enorme hándicap de contar como protagonista con Channing Tatum. En cualquier caso hablamos de un filme con un diseño estético muy notable y que cuenta con un ritmo narrativo más que aceptable. La Luna es mística y mágica. Ha sido la mayor fuente de luz que ha tenido la humanidad de noche durante miles de años, en esas horas donde se da rienda suelta a la pasión. En definitiva, hablamos de una película que recrea de manera cómica uno de los mayores logros de la humanidad y que de paso da una lección de como a través del marketing se puede engañar o seducir a millones de personas. 

Nota: 7/10.


Nacionalidad: Estados Unidos

Género: Comedia romántica 

Dirección: Greg Berlanti

Guion: Rose Gilroy

Fotografía: Dariusz Wolski

Música: Daniel Pemberton

Duración: 130 minutos

Reparto: Scarlett Johansson,
Channing Tatum Jim Rash,
Ray Romano, Colin Woodell, 
Anna Garcia, Woody Harrelson


martes, 9 de julio de 2024

Películas curiosas: "Impacto" de Arthur Lubin


Impacto dirigida por Arthur Lubin es una película clásica estrenada en el año 1949 y enmarcada en el ámbito del cine negro americano. La cinta podría haber sido publicada en la sección de ¡Qué maravilloso es el cine!, pero guarda entre sus entrañas una curiosidad o peculiaridad que la inscribe en mi serie de películas curiosas de la historia del cine.

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Walter (Brian Donlevy) es un exitoso empresario que vive en un idilio permanente junto a su joven esposa Irene (Helen Walker). Pero como dice el refrán: "No es oro todo lo que reluce". El industrial desconoce que su mujer tiene un amante y que juntos han ideado un siniestro plan para matarle. Al ser consciente de estos hechos tras un incidente, decide esconderse un tiempo en un alejado pueblo. Allí, prepara la venganza a la vez que asume el duelo por el engaño al que ha sido sometido. En el pequeño municipio al que ha ido a parar, conoce a una joven llamada Marsha (Ella Raines). Ésta, le ayudará a recomponer su vida y a preparar su vuelta a la ciudad en la que volverá a encontrase con su todavía esposa. 


Impacto es una de esas películas que podría ser mencionada como ejemplo de tener un buen argumento. Es decir, un buen guion. Pero como decía en la presentación, la película es bastante curiosa porque fue una de las primeras que incluyó sin tapujos la publicidad encubierta en el cine. La Coca-Cola sale dos veces mencionada y la imagen de la marca se ve reflejada con claridad en dos escenas.

Otras marcas comerciales que se ven en pantalla son las furgonetas Bekins, gasolina, aceite y neumáticos Mobil, la cerveza Pabst Ribbon, los relojes Gruen y las joyas de Magnin & Co. Estas son presentadas en las escenas iniciales y están perfectamente integradas en la trama. A lo largo de la cinta, la esposa de Walter sigue usando varias joyas de Laykin et Cie.

Otra curiosidad de la cinta es que aparece en el cine una de las primeras mujeres que se dedicaban a la mecánica de coches en un taller. De hecho, en la actualidad sigue siendo una rareza que una mujer trabaje de mecánico. Suelen estar, si están, en la recepción de los talleres. Esto no pretende ser ni un alegato, ni una defensa, ni un ataque. Es una realidad sin más que añadir por mi parte.


Respecto a la propia temática de la película y debido a sus características voy a contar muy poco. Hablamos de un cine de intriga y suspense que debe ser disfrutado en su totalidad para quien aún no haya visto la producción. Los narrativa se circunscribe al clásico cine negro con continuos giros de guión de principio a fin de la propuesta.

El reparto está alejado del glamour de las estrellas de cine de Hollywood. Casi podríamos hablar de cine B por su presupuesto. Brian Donlevy interpreta de manera potente al empresario engañado. Su personaje representa la frustración, el dolor y el duelo por haber perdido el amor de la mujer a la que tanto amó.

Por su parte, Helen Walker no acaba de convencer en su interpretación como villana mayor del reino. Su personaje es la crueldad personificada. Es manipuladora, fría y calculadora. Por el contrario, el personaje de Marsha es su perfecta antítesis. La joven que cura las heridas del industrial engañado es todo bondad. Se encarga de este papel la bella actriz americana Ella Raines que impresiona por sus enormes ojos azules que resaltan incluso en el blanco y negro de la filmación.


En conclusión, Impacto es una pequeña joya del cine clásico que aporta numerosas curiosidades para la historia de la cinematografía. Una película que también nos invita a investigar en el comportamiento del alma humana o sencillamente un filme que sirve para hacernos disfrutar del maravilloso mundo del cine.


Título original: Impact

Duración: 111 minutos

Género: Cine negro, Drama

País: Estados Unidos

Dirección: Arthur Lubin

Guion: Dorothy Davenport, Jay Dratler
(Historia: Jay Dratler)

Música: Michel Michelet

Fotografía: Ernest Laszlo

Reparto: Brian Donlevy, Ella Raines,
Charles Coburn, Helen Walker,
Anna May Wong, Robert Warwick,
Clarence Kolb, Art Baker

martes, 2 de julio de 2024

En tierra de santos y pecadores: directa, sencilla y funcional


En tierra de santos y pecadores dirigida por Robert Lorenz se estrena en cines españoles el día 3 de julio de 2024. El filme irlandés participó en la Sección Orizzonti Extra de la 80ª edición del Festival de Cine de Venecia. 

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La historia: Irlanda, años 70. Deseoso de dejar su oscuro pasado atrás, Finbar Murphy (Liam Neeson) lleva una vida tranquila en el pequeño pueblo costero de Glen Colm Cille, lejos de la violencia política que asola el resto del país. Cuando llega al pueblo un peligroso grupo de terroristas liderado por la despiadada Doireann (Kerry Condon), Finbar se verá inmerso en un peligroso juego que le obligará a elegir entre mantener su identidad secreta o defender a sus vecinos y amigos (Vértice Cine). 

La crítica: Relativa y grata sorpresa la que nos depara un filme destinado a ver en salas de cine por su formato con grandes panorámicas. O sea, hablamos de la antítesis de lo que son los telefilmes. Ya en la presentación observamos esa grandeza que también ofrece un relato de hechos bien construido. Veremos un atentado del IRA con coche bomba que luego imitaría ETA en España en los llamados "años de plomo". 

En tierra de santos y pecadores es una clásica cinta de acción, pero su narrativa contiene algunos de los elementos narrativos del western. También nos ofrece una mirada sobre el IRA y sobre Irlanda. La banda se formó en 1913 como los Voluntarios Irlandeses, en una época en la que toda Irlanda formaba parte del Reino Unido. Los Voluntarios participaron en el Alzamiento de Pascua contra el dominio británico en 1916 y en la Guerra de Independencia que siguió a la Declaración de Independencia del Parlamento revolucionario Dáil Éireann en 1919, durante la cual el grupo pasó a ser conocido como el IRA.

El cineasta ha optado por narrar una historia original, ambientada en una época y un lugar especiales, con un reparto de personajes muy peculiares. La película cuenta la historia de un irlandés que debe elegir entre mantener en secreto su vergonzoso pasado de sicario o revelarlo todo para proteger a sus amigos y vecinos de los terroristas que han invadido su tranquilo pueblo costero. Se ha propuesto hacer una película auténtica y lo ha conseguido. Desde la textura de los trajes de época hasta los paisajes agrestes como telón de fondo, pasando por el reparto irlandés con sus peculiares acentos, el objetivo es transportar al público a este mundo único en esa Irlanda que ya veíamos en Almas en pena de Inisherin.


Liam Neeson vuelve a hacer de Liam Neeson, pero con un traslado hacia los años setenta del siglo pasado. Su personaje es similar al ya visto en muchas ocasiones: pistolero, asesino, vengativo, justiciero y en busca de redención una vez que se ha cargado a medio planeta. En cualquier caso hace un buen papel con un filme de profundas raíces irlandesas. Aparte de dos "compañeros de trabajo", sólo mantiene una relación muy estrecha con su anciana vecina, Rita, y con Vincent, el policía local, ninguno de los cuales conoce su verdadero ser. Luego está Kerry Condon como jefa del comando terrorista del IRA que se refugia en una casa alejada del pueblo. Por una disputa personal con el personaje de Neeson comienzan una persecución a modo de perro y el gato en el que solo uno sobrevivirá.

La banda sonora juega con los códigos típicos de un western, mezclados con instrumentos tradicionales irlandeses y combinados con una orquesta sinfónica y un coro para darle ese aire misterioso de los años setenta. Para las imágenes pausadas y poéticas, la película necesitaba temas hermosos que varían y se establecen a lo largo de la película. La música prepara al público para un gran enfrentamiento. Las grandes panorámicas completan lo mejor de la cinta en los aspectos técnicos. 

En tierra de santos y pecadores es directa, sencilla y funcional. Da al público lo que busca en este tipo de cine y lo hace de manera notable. El guion está bien estructurado y las interpretaciones son buenas. En el debe, cabría decir que no se profundiza demasiado en el conflictivo pasado político de Irlanda. En definitiva hablamos de un filme que pivota sobre el género acción, el western y el thriller con un resultado más que positivo.

Nota: 7/10.


Nacionalidad: Irlanda

Título original: In the Land of Saints and Sinners

Género: Acción, Thriller

Dirección: Robert Lorenz

Guion: Terry Loane, Mark Michael McNally

Música: Diego Baldenweg

Fotografía: Tom Stern

Duración: 105 minutos

Reparto: Liam Neeson, Ciarán Hinds, 
Colm Meaney, Kerry Condon, 
Jack Gleeson, Desmond Eastwood.