Cine como sueño, cine como música. Ninguna forma de arte va más allá de la consciencia ordinaria como el cine, directo a nuestras emociones, profundo en el cuarto crepuscular del alma. -Ingmar Bergman.
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Con estas apasionadas palabras de Ingmar Bergman sobre el mundo del cine se abre una nueva temporada de Cine y críticas marcianas. Si todo va bien, este periodo irá desde septiembre de 2019 hasta finales de julio ya en el estío de 2020. Y si de verano hablamos, nada mejor que comenzar con una película clásica que simboliza a la perfección esta estación del año. Los amores veraniegos son la esencia de la película hoy reseñada.
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Estocolmo año 1953. Mónica (Harriet Andersson) es una muchacha de 17 años que se gana la vida trabajando en una frutería. Por otro lado, está Harry (Lars Ekborg). Él tiene 19 años y trabaja de aprendiz embalando paquetes en un pequeño comercio de la ciudad.
Ambos comparten la frustración de estar siendo maltratados en sus respectivos puestos de trabajo. Pero todo cambia para ellos cuando se conocen en una cafetería. Allí se enamoran y deciden dejar sus trabajos para irse a pasar el verano en la pequeña embarcación de Harry. ¿Qué harán cuando se les acabe el dinero? ¿Será todo tan idílico como habían planeado? ¿Seguirán su noviazgo cuando el verano llegue a su fin?
Filmoteca de Sant Joan |
El cineasta sueco Ingmar Bergman siempre ha estado en el punto de mira para que algunas de sus películas fueran retro-reseñadas en la sección de: ¡Qué maravilloso es el cine! en Cine y críticas marcianas.
Es un director que causa algunas controversias entre crítica y público. Mientras la primera lo eleva a los cielos del séptimo arte, no son pocos los cinéfilos que califican su cine como demasiado denso. Es por ello, que he querido elegir una de sus películas más sencillas para quien desee introducirse en su cinematografía. La historia está tratada de una manera frugal, recreativa y con contenidos universales.
Un verano con Mónica es una fábula sobre el amor, la amistad, la traición, los celos, la maternidad, la sexualidad, el desengaño y los errores que nos llevan a formarnos como personas. Ingmar Bergman divide de manera natural el argumento en tres actos que se corresponden con la clásica presentación de personajes, el nudo narrativo y el desenlace de la propuesta. En el cine, como en la vida, menos es más y la sencillez en una narración es fundamental para una buena conexión con el público.
Conociendo a los personajes (presentación)
En el primer tercio de la cinta conocemos a la pareja protagonista que residen en un Estocolmo lúgubre, industrial, y con algunas bolsas de pobreza que contrastan con el poderío económico de la Suecia de nuestros días. De esta manera, Bergman bebe del Neorralismo italiano para situarnos en el contexto socio-económico del país nórdico. A su vez, podemos encontrar ciertas semejanzas en la presentación con el filme Un lugar en el sol de George Stevens.
En la presentación de la cinta el cineasta sueco nos habla de dos jóvenes con empleos no cualificados que se enamoran como tantos otros. Lo singular de la historia es que encuentran como nexo de unión el maltrato que reciben en sus puestos de trabajo. Los jóvenes también comparten la falta de comunicación con sus respectivas familias y sus deseos de llevar una vida independiente. Pero sobre todo, están unidos por una fuerte atracción sexual que los lleva a su escapada veraniega.
Mónica y Harry son dos polos opuestos que se atraen. Él es tímido, responsable y de carácter más familiar. Ella es extrovertida, jovial, promiscua y rebelde en esencia. Con este cocktail explosivo Bergman conecta rápido con el espectador y nos lleva de huida en un verano que cambiará las vidas de los personajes representados.
El verano de Mónica y Harry (desarrollo)
Ingmar Bergman transita en la parte central de la película desde la oscuridad de la ciudad hasta la luminosidad en los archipiélagos donde centra el romance de los dos jóvenes. Allí, despreocupados y sin pensar en el futuro dan rienda a sus instintos sexuales más primarios.
El cineasta sueco despliega un erotismo sutil, cuidado e hipnótico fijando la mirada de la cámara en la desbordante sensualidad de la actriz Harriet Andersson. Tanto fijó la cámara en ella que se enamoró de la actriz durante la filmación. De hecho, mantuvieron un romance durante la película que llevó al director a divorciarse de su esposa. Pero de manera independiente a esta situación personal, esta parte de la película está plagada de bellísimos planos que recorren palmo a palmo el rostro y el cuerpo de la actriz. Algunos desnudos de la joven interprete provocaron el escándalo en los sectores más conservadores. Hoy en día pasarían desapercibidos por la naturalidad de los mismos.
Cuando el verano llega a su fin, Harry y Mónica, que se han bebido la vida a besos, tienen que afrontar la realidad y volver a la ciudad tras quedarse sin recursos. La edad de la inocencia ha llegado a su fin.
La vuelta a Estocolmo, la vuelta a la realidad (resolución)
El último tercio del filme es el de mayor potencia cinematográfica. En el mismo, se resolverán los conflictos planteados a lo largo de la película de una manera sorprendente. El final que por lógica no desvelaré es de cine con mayúsculas. Ingmar Bergman cumple con eficacia y brillo las estructuras narrativas naturales de presentación, nudo y desenlace de una manera perfectamente sincronizada.
Un primer plano para la historia del cine
Con este primer plano de una desafiante Harriet Andersson mirando directamente a cámara, Ingmar Bergman rompió una regla no escrita en la historia del cine. En ella, se prohibía a los actores que miraran directamente al objetivo. El director, a través de la actriz, retaba al espectador en un desafío directo que luego siguieron otros muchos cineastas. El mito Bergman ya era una realidad y sus influencias llegan hasta nuestros días.
En conclusión, Un verano con Mónica me parece una película perfecta con la que recordar o introducirse en una filmografía tan especial como es la del maestro Ingmar Bergman. Muchas gracias por vuestra compañía y bienvenidos a una nueva temporada de Cine y críticas marcianas.
Nacionalidad: Suecia.
Título original: Sommaren med Monika.
Año: 1953.
Duración: 97 minutos.
Dirección: Ingmar Bergman.
Guion: Ingmar Bergman, Per-Anders Fogelström.
Novela: Per-Anders Fogelström
Música: Erik Nordgren.
Fotografía: Gunnar Fischer (B&W).
Reparto: Harriet Andersson,
Lars Ekborg, John Harryson,
Georg Skarstedt, Bengt Eklund.
Lars Ekborg, John Harryson,
Georg Skarstedt, Bengt Eklund.
Wow! Todo un clásico que ha marcado la historia de nuestro cine. Te asumo que no la he visto, pero que no le haría ascos... ¡¡eso era cine no ganchos para captar gente a la taquilla como ahora!!
ResponderEliminarHemosVisto!
Hay películas un tanto desconocidas que efectivamente marcaron pautas en la historia del cine. En este caso, Bergman se atrevió a desafiar 50 años de cinematografía a través de la mirada de Harriet Andersson.
EliminarSaludos y gracias por comentar.
un verano con Monika escepcional pelicula Miguel con la que nos das tu vuelta a tan sabio consejo para var y retomar dentro de nuestros recuerdos cinefilos lo que la hacen doblemente merecedora a tan estupenda recomendacion pues se puede visionar y traer a nuestras mentes la labor brilente de Berman en su actuacion de direccion y guion un hito del cine , feliz regreso y mis saludos con un fuerte abrazo . jr.
ResponderEliminarHola José Ramón.
EliminarSupongo que en el cine, como en la propia vida, es bueno recordar de donde venimos para poder vislumbrar hacia donde vamos. Respecto al cine de Ingmar Bergman se suelen hacer retrospectivas en festivales y siempre es una buena oportunidad para revisitar sus clásicos en la pantalla grande.
Un fuerte abrazo y gracias por tu cálida bienvenida.
Hola! Brillante trabajo.gracias por mostrarlo y contar tantas cosas interesantes y que desconocía! Mil gracias.un placer leerte y saludarte
ResponderEliminar¡Hola! Muchas gracias por tus palabras y encantado de que hayas disfrutado con la reseña. Un placer igualmente saludarte de nuevo.
Eliminar"Hoy en día pasarían desapercibidos por la naturalidad de los mismos". ¿Estás seguro? Quiero creer que sí, pero mucho me temo que saldrían otro tipo de fundamentalistas acusándole de tratar a la mujer y a su cuerpo como un objeto.
ResponderEliminarFui muy fan de Bergman allá a finales de los 70 y durante los 80. Tiene películas muy densas, es cierto, pero de una calidad inigualable. nadie como él analizó la psicología de personajes y lo que deparan ciertas situaciones. Sé que no es para el gran público, y yo misma ha habido una película suya en la que no he entendido nada y me he aburrido soberanamente. Hablo de "El séptimo sello", aunque puede que la viera demasiado joven. Ahora, cuando entras en su cine, es fascinante.
Concretamente, esta película no la he visto. Tomo buena nota.
Un beso.
Hola Rosa, yo también quiero creer que si. Además fueron desnudos muy cándidos y casi virginales. Otra cosa es como bien dices que algún tarado pudiera acusar a Bergman de cualquier barbaridad. Respecto a su cine en general, casi como todos los cineastas de largo recorrido, tiene grandes obras y tremendos bodrios. Yo mismo tengo pendientes algunas obras de su filmogafría y revisitar, entre otras, "El séptimo sello" para acabar de formarme una opinión más a fondo de la misma.
EliminarEn el caso de la peli reseñada hoy es de una narrativa muy sencilla y natural pero con un final más profundo de lo que puede parecer en principio.
Un beso y gracias por tu enriquecedor comentario.
Menuda deuda tengo yo con este director, casi no he visto nada suyo. Me apunto esta como deberes.
ResponderEliminarUn saludo
Pues nada Victor, te animo a visitar algunas de sus películas y porque no a reseñarlas también.
EliminarUn gran saludo.
Una historia de amor tórrida a esa edad sin pensamientos futuros y que después seguramente terminan mal. No la he visto, pero según haces la narración tan hermosa, invitas perfectamente a ello.
ResponderEliminarMe encanta como desarrollas los temas, y es un placer leer siempre tus letras.
Me gusta mucho la reflexión que hace sobre el arte del cine, Ingmar Bergman, y me gusta los separadores de texto que has puesto, :)))
Espero que hayas pasado un verano encantador.
Un abrazo Miguel.
Hola Elda, no puedo desvelar si la cosa acaba bien o acaba muy mal, ja,ja,ja. Pero bueno supongo que según sea el cristal por donde se mire y nunca mejor dicho. Es decir, el final de la película tiene que ver bastante con un cristal o mejor dicho con un espejo.
EliminarPor lo demás, agradecerte muchísimo tu bienvenida y las palabras tan bonitas con la que lo expresas.
Un fuerte abrazo.
Pues la verdad es que no la he visto pero tu reseña me ha despertado la curiosidad. Voy a buscarla. Me alegro mucho de que estés de vuelta, Miguel. Tus recomendaciones siempre valen mucho la pena;)
ResponderEliminarHola Marta, es una película especial pero quizás no sea muy fácil de encontrar. Yo tuve la ocasión de verla en una retrospectiva y me parece una peli ideal para comenzar con este cineasta.
EliminarGracias por tus palabras. Un abrazo.
¡Bien hallado, Miguel! Bueno, lo primero es desear que hayas disfrutado de las vacaciones. Lo segundo, ¡me encantó la nueva cabecera! Y lo tercero, que no menos importante, una excelente recomendación. Sobre todo para aquellos que, como yo, pertenecemos a ese grupo a los que este director nos pilla lejano. Creo que vi alguna de sus películas demasiado joven, y ya viejuno nunca encontré el momento de acercarme a su filmografía. Así que me guardo esta prescripción cinematográfica que nos has extendido para redescubrir a esta leyenda del cine. ¡Un fuerte abrazo!
ResponderEliminar¡Muchas gracias David! Al final opté por hacer cambios más leves de los que te comenté en principio. Pero bueno, estoy contento con el diseño de la cabecera que nos habla de Casablanca, de Ingrid Bergman y de La La Land a través de Emma Stone.
EliminarRespecto al cineasta sueco hay que ir con cuidado pues tiene películas brillantes y también algún que otro tostón. En este caso "Un verano con Mónica" es una peli sencilla y muy placentera de ver.
Un fuerte abrazo amigo.
Bienvenido, Miguel!!.
ResponderEliminarEs muy grato volver a disfrutar de tus críticas cinematográficas.
He visto varias de sus películas pero la que comentas no la recuerdo.
Parece una buena historia.
Estupenda tu reseña.
Un beso. Feliz regreso.
Muchas gracias Amalia.
EliminarNo es una de sus películas más conocidas y sin embargo es la predecesora de muchos detalles que luego tomarían forma en la carrera del cineasta sueco.
Besos y bienvenida tú también.
Bienvenido Miguel!, espero que el verano haya servido para recargar pilas y para que nos recomiendes películas tan sensacionales como esta. He visto el tráiler con la esperanza de que alguna escena me la recordara. Creo que no la vi, así que este fin de semana no perderé, siguiendo tu consejo, la oportunidad de verla.
ResponderEliminarUn abrazo!
¡Hola Norte! Muchas gracias por tu calurosa bienvenida. Como buen viajero que eres disfrutarás de la película e identificarás paisajes de la capital y los archipiélagos suecos.
EliminarUn fuerte abrazo.
¡Contenta con tu regreso, Miguel! Como inicio de la nueva temporada te lanzaste con todo ¡Bergman! Un maestro del cine, pero también muy complejo y críptico. Vi unas cuantas de sus películas y algunas no supe entenderlas. La que presentás hoy me es desconocida, pero disfruté mucho de tu retro-reseña, porque es excelente. Me gustó tanto que me animo a marcarte un error de tipeo para quede perfecta: "plagada de bellísimos (de) planos".
ResponderEliminarEl trailer es hermoso, con esos planos de la intensa mirada de Harriet.
Felicitaciones por el nuevo header, me encanta.
Un gran abrazo.
¡Hola Mirella, gracias por tu entusiasta comentario!
EliminarComo comentaba antes "Un verano con Mónica" no es una de sus películas más conocidas y sin embargo es la predecesora de muchos detalles que luego tomarían forma en la carrera del cineasta sueco. Gracias también por la corrección. La verdad no sé si solo me pasa a mí pero cuando corrijo algo en Blogger ya publicado, o bien se descuadra el texto o bien aparecen palabras como ese (de) que yo no había escrito. Cosas de marcianos, ja,ja,ja. Me alegro que te guste la nueva imagen del blog y que hayas disfrutado del espectacular trailer.
Un cariñoso abrazo.
Aunque las películas de Bergman también me han resultado (al menos las que he visto) densas, siempre me han gustado, por su particular forma de narrar y mostrar las historias, generalmente intimistas.
ResponderEliminarEsta, en concreto, no la he visto, pero bien valdría la pena.
No obstante, cuando de películas de una cierta antigüedad se trata, sigo teniendo que vencer un cierto rechazo primitivo. Las imágenes del trailer, sin ir más lejos, parecen más propias del cine de los años 40 que de los 50.
Sé de sobra que lo importante es el fondo, la historia en sí y la interpretación (aunque me aventuraría a decir que esta también me parecería "anticuada"). No sé por qué será, pero el sonido, el doblaje (las voces de los personajes) e incluso la interpretación en filmes de aquella época se me antojan artificiales, menguados de naturalidad. Deben ser prejuicios de quien no entiende de cine, je.je.
Un abrazo.
Así es Josep. Hablamos de un cine intimista e intenso. En concreto, Un verano con Mónica es de las películas más digeribles del cineasta sueco. Yo soy un amante del cine clásico aunque no todo es bueno claro. Respecto a lo que comentas de este tipo de cine con carácter general creo que la clave está en un doblaje que se ha quedado muy desfasado. Ver cine clásico en versión original da la vuelta en parte a la situación que comentas. Aun así, como yo tampoco entiendo mucho de cine ja,ja,ja, fíjate que coincido en tu planteamiento de fondo. Es decir, pienso que el cine ha mejorado con el paso de los años y se interpreta bastante mejor que antes. Las historias son más reales. El problema que surge es que el cine se superhéroes, las comedias absurdas o el puro cine comercial son el bosque que tapan las ramas del buen cine que se hace en la actualidad.
EliminarUn abrazo de regreso.
¡Hola, Miguel!
ResponderEliminarEsa mirada hace que el espectador forme parte de la película, convierte la escena en algo más íntimo, más personal. Me parece una manera de narrar que te adentra en la inmensidad introspectiva de la trama. Como un viaje emocional por las vivencias de unos chicos jóvenes, que inocentemente creyeron y vivieron una etapa plena y libre por esa inocencia caracterizada en la edad.
Un beso, y gracias por la recomendación.
¡Hola, Irene!
EliminarBienvenida a tu casa de nuevo :). ¿Y qué añado yo a lo que tu has comentado? Lo has definido también y con tanta precisión que no es necesario añadir nada más.
Besos y gracias a ti.
Buen día Miguel, espero que hallas pasado unos días de descanso reconfortante y que mejor manera siempre de iniciar un mes con algo de cine clásico, esperemos que regreses recargado al 100% y que sea esta una mejor temporada que la anterior, se te desea lo mejor y ya se te extrañaba, saludos.
ResponderEliminarBuen día Jaime y gracias por tus cordiales palabras de bienvenida. El cine clásico y más una película que nos habla sobre el verano, siempre es una buena manera de comenzar temporada.
EliminarSaludos hasta México!!
Hola Miguel.Me encanta leerte de nuevo.Bergman no es fácil, pero no deja indiferente.Esta película no la conozco.Después de tu reseña la iré a ver. Abrazo
ResponderEliminarHola Betty, bienvenida de nuevo y agradecido por tus comentarios. Esta peli es muy disfrutable. Si la encuentras creo que te gustará. Un cálido abrazo.
Eliminar¡Hola Miguel! Que bien que ya estés por aquí de nuevo. Te echaba de menos... Ahora mismo no recuerdo haber visto esta peli de Ingmar Bergman, pero en general me gusta lo que hace. Me ha encantado esa frase tuya de "que se han bebido la vida a besos"
ResponderEliminarEspero que hayas pasado un verano estupendo.
Un beso
¡Hola Marian!
EliminarGracias por tus palabras de bienvenida. Yo también os he echado de menos .). Esta peli se podría considerar incluso una rareza en el cine de Bergman. Sin embargo, algunos la consideran su primera obra maestra. Él también fue un hombre que se bebió la vida y el cine a besos, ja,ja,ja.
Un beso.
Hola Miguel. Cuando vi tu reseña no recorde la película, así que busque en youtube a ver si por casualidad estaba y la encontré en su títulos en portugués e inglés, así que me puse a ello, resultó que si la había visto, pero no la acababa de recordar del todo y la he repetido. Es una de esas películas donde casi cada fotograma podría ser una postal y el ritmo de desarrollo de la trama es relajante, la historia que nos cuenta es como bien dices, una sucesión de decisiones erróneas o no que nos llevan a formarnos como personas. Y sobre Berg man opinemos lo que opinemos es uno de los grandes referentes de la cultura del cine. Un gran saludo y un hermoso regreso por tu parte.
ResponderEliminarHola Maria Rosa. Qué bueno volver a contar con tus comentarios en esta nueva temporada de cine. La verdad es que desconocía que la peli estaba en Youtube y con subtítulos en portugués. Si la has visto así la experiencia ha debido ser más que curiosa. En cualquier caso, es una filmación más de imágenes incluso que de diálogos. Como bien dices el cine es cultura y Bergman siempre será un buen referente.
EliminarSaludos y gracias por tu bienvenida.
Me gustan las pelis en blanco y negro.
ResponderEliminar¡Cómo pasa el tiempo!
El tiempo pasa en un suspiro. Por eso creo que siempre es bueno recordar el bello cine en blanco y negro. Un saludo Manuel.
EliminarMe encantó el trailer y la buscaré. El cine de Bergman siempre me gustó. Gracias por la recomendación.
ResponderEliminarBuena vuelta y buen domingo.
Un abrazo.
El trailer es sensacional Laura. De hecho, contiene la secuencia citada que fue un hito en la historia del cine.
EliminarGracias por pasarte y buena semana. Un abrazo.
Un gusto tenerte de vuelta, Miguel.
ResponderEliminarEl comienzo de la nueva temporada no puede ser mejor con esta estupenda reseña.
Tampoco yo he visto Un verano con Mónica, pero me ha entrado ganas de verla al leer tu entusiasta reseña.
Un abrazo.
El gusto es mio Carmen, gracias por tu cálida bienvenida. Como he comentado Un verano con Mónica no es una película muy conocida fuera de los circuitos más cinéfilos. Sin embargo, me parece una oportunidad para disfrutar del cine de otro tiempo.
EliminarUn abrazo.
Un clásico que debo volver a ver, sin duda.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Saludos.
Bienvenido a Cine y críticas marcianas Dylan. Sin duda, la peli de Bergman es un clásico que es un gusto volver a revisitar.
EliminarSaludos.
me debo todo Bergman y es imperdonable porque Allen con su cine ,me lo recomendó miles de veces jaja...
ResponderEliminarpero lo que a mi me intriga es lo que pensás de la última de Tarantino... decime que la viste y que vasa hacer una crítica! saludos master...
Hola Master, el cine de Woody Allen para mí es incluso superior al de Bergman. Es un maestro y deseando ya de ver su próximo estreno que llega a España en octubre. Respecto a la última de Tarantino se estreno en España el 15 de agosto y como estaba de vacaciones no la vi en su momento. Me parece que es ya un poco tarde para reseñarla por mi parte. Un gran saludo hasta Argentina.
EliminarHola Miguel, espero que lo hayas pasado super bien y los marcianos hayan sido gentiles y amenos contigo.
ResponderEliminarMe gustó mucho el estilo de la reseña, no se por qué me pareció leerla en blanco y negro, o sea, con esos aires de inocencia y candor de antaño, que creo que ya ni existen hoy.
Desde luego no la he visto, y no me suena nada ese señor, así que será como nueva para mi.
Tambien me gustó el nuevo look del blog, un buen mosaico, y la lámpara encendida le da un toque genial.
Gracias Miguel por empezar la temporada con tanto candor, supongo que el verano te trató muy bien sentimentalmente.
Feliz regreso, y un cálido abrazo.
¡Hola, Idalia!
EliminarMenudas fiestas hemos montado en Marte: mojitos, playita, cine de verano marciano y en general una cosa muy loca, ja,ja,ja. La verdad es que has definido muy bien la peli. Rezuma candor, inocencia y sin embargo su final es muy potente. Una enseñanza de vida.
Me alegro que te guste el nuevo diseño del blog marciano. Pero sobre todo me alegro de encontrar de nuevo tu cálida compañía.
Gracias y otro abrazo de regreso.
Hola Miguel! un placer volver a leerte después del parón veraniego! aquí volvemos a por otra temporada más! jeje. Ya sabes que yo cine clásico, he visto poquito, así que esta película no la conocía, pero siempre es un gusto saber más del cine gracias a tus maravillosas reseñas. Una entrada genial para la vuelta al blog. Besos.
ResponderEliminar¡Hola, Verónica! Pues gracias por tu bienvenida y encantado de volver a verte por el blog marciano. Respecto a la película no es muy conocida fuera del ámbito muy cinéfilo. Quizás eso me haya empujado a reseñarla. Besos.
EliminarHola Miguel,
ResponderEliminarBien cierto es que los polos opuestos se atraen y cierto es que las vidas no son todas perfectas. La peli tiene jugo. Puede ser una bomba de relojeria para una pareja que comienza. Las atracciones sexuales, no traen nada bueno, y por eso creo que debe ser una coctelera de emociones que ilustran al que ve, la realidad de la misma. Buen trabajo.
Buena vuelta, y mejorao. Nos vamos leyendo.
Hola Keren, efectivamente la película tiene bastante jugo y su mensaje se podría trasladar a la época actual. Dices que las atracciones sexuales no traen nada bueno...pero sin la atracción sexual imagínate como estaría el indice de natalidad ja,ja,ja.
EliminarUn abrazo y gracias por tu comentario.
Hola Miguel, espero que hayas pasado un verano genial. Es una de esa película inolvidable que vi hace tiempo, una historia llena de romanticismos que termina, con el fin del verano, con las ilusiones de la pareja protagonista de poder vivir al margen de las convenciones sociales. Sólo los quedará el recuerdo de unas semanas en las que pudieron ser realmente felices. Maravillosa reseña.
ResponderEliminarMiguel, un grande abrazo.
Hola Cristina, igualmente espero que hayas tenido un buen verano. Creo que de los que han comentado eres de las pocas que había visto la película de Bergman. Y sí claro, la pareja protagonista se lleva un recuerdo imborrable y el fruto de su amor. Abrazos y bienvenida de nuevo.
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