sábado, 27 de febrero de 2016

El bosque de los suicidios (The Forest)


El cine de terror, es un género que no causa indiferencia en los espectadores. O gusta mucho o no gusta nada. A mí personalmente si me gusta, aunque no sería unos de los géneros que sigo con mayor frecuencia. Aún así, cuando se consigue una buena producción es un tipo de cine que puede ser muy divertido. Esta película esta inspirada en desgraciados hechos reales.

En Japón, cerca del monte Fuji hay un bosque llamado Aokigahara. Allí acuden decenas de japoneses cada año para suicidarse. Pues bien, partiendo de estos luctuosos sucesos se construye la trama de la cinta.

La historia trata sobre dos hermanas gemelas, interpretadas ambas por Natalie Dormer (Juego de Tronos). En esta ocasión y en un doble papel nos deja indiferentes en su actuación. Una de las hermanas viaja hasta Japón para adentrarse en el bosque con propósitos suicidas y su gemela acude hasta Japón al rescate desde su América natal.

Pues bien, lo que en principio parece un prometedor argumento apoyado en un espectacular pero engañoso tráiler, se convierte en un chasco colosal. En primer lugar la iluminación atenuada resulta muy antipática para el espectador. La fotografía en el cine, es el primer mensaje que nos encontramos al visionar una película y si esta no está bien cuidada nos predispone en contra de lo que estamos viendo. Hay miles de ejemplos en el cine de que es posible hacer una iluminación perfecta en escenas nocturnas. De todas formas la cinta no despierta ningún interés, ni consigue en ningún momento la implicación del espectador. Dan ganas de salirse de la sala de cine, con eso está todo dicho.

Lo que sí me ha llevado a reflexionar, es la acertada prohibición de las autoridades japonesas de rodar la filmación en el verdadero bosque para prevenir en la medida de lo posible futuros suicidios. En Japón la tasa de suicidios es de las más altas del mundo, así que la decisión es correcta.

Esto nos lleva a una reflexión sobre los peligros de los temas tratados en el mundo del cine. El suicidio se ha banalizado de forma grave en esta cinta. Se podrían haber evitado futuras tentaciones de jóvenes con problemas depresivos que al ver la película se pueden ver tentados a viajar al bosque maldito. Es una absoluta irresponsabilidad y más teniendo en cuenta que el suicidio es la segunda causa de pérdida de vidas entre los jóvenes de menos de treinta años según un informe de la Organización Mundial de la Salud. No vale todo. Tampoco en el cine. 

Desde aquí quisiera transmitir mucho ánimo a todas las personas con problemas depresivos y quisiera recordar también que el suicidio siempre es una mala opción pues no tiene vuelta atrás. Hay muchas otras opciones mejores: desde un cambio radical de vida, cumplir algún sueño que tengamos pendiente o buscar algún tipo de motivación personal. Además lógicamente, es imprescindible acudir a los profesionales de la salud indicados para estos problemas.

Por volver a la cinta y como curiosidad, cabe decir que la película está rodada en un bosque de Serbia, y no en el real pues como comentaba antes las autoridades japonesas se negaron. 

Para concluir diría que el debut como cineasta de Jason Zada es algo más que decepcionante, eso sí, le reconozco una cosa buena y se la agradezco. La cosa es que se debió dar cuenta del auténtico tostón que estaba realizando y decidió ajustar su metraje al máximo. De hecho, creo que si la película llega a durar media hora más, el que se hubiera planteado irse de visita al bosque de los suicidios hubiera sido yo.

Nota: 1/10.

miércoles, 24 de febrero de 2016

Shakira y su mensaje, la guinda de Zootrópolis (Zootopia)


En Zootopia, la artista colombiana pone voz a uno de los personajes de la película. En concreto a Gazelle, una gacela metida a cantante. También interpreta el tema musical central de la cinta con una canción llena de vitalidad como ella misma. Pero lo que quiero destacar de Shakira en esta ocasión, es el mensaje que quiere transmitir a la sociedad y es el que expongo a continuación.

Cuando Disney la llamó para invitarla a participar en Zootopia y ella vio el personaje que le proponían doblar, Shakira puso como única condición que a su personaje le modificaran sus formas femeninas. La delgadez excesiva de la gacela, que era su personaje, podría dar mal ejemplo a las niñas y jóvenes. Lo que ella pedía era que las formas del cuerpo se asemejaran más a las de la mujer real. Disney aceptó encantado la propuesta y se aseguró con ello la participación de la artista colombiana. 

Yo desde este pequeño blog, voy a hacer mi particular yo acuso, inspirado en el escritor francés Émile Zola que fue el mejor representante del Naturalismo. Desde aquí acuso al mundo de la moda, en particular a algunos modistas muy importantes, de haber provocado el nacimiento de una enfermedad tan grave como la anorexia nerviosa. Y les acuso, por promover que las modelos en sus desfiles, tengan que ir con la ridícula talla 36 cuando no con la 34.

¿Nos estamos volviendo locos? Esas tallas son para chicas muy jóvenes, incluso diría yo, que son tallas de niñas o en todo caso de mujeres muy delgadas. Las féminas reales no son así. Es decir, habrá de todo, pero la mujer con sus curvas naturales puede ser tan bella o más que estas modelos que falsean una realidad inexistente. Les acuso además de ignorar que la mujer desde que es una niña ya empieza a acumular grasas por su propia condición natural. Con ello va preparando al cuerpo con reservas grasas por si el feliz acontecimiento de un embarazo se sucediera en un futuro.

La anorexia no es ninguna broma y la prohibición por ley de que haya modelos por debajo de la talla 36 sería una posible solución para ayudar a erradicar este trastorno.

lunes, 22 de febrero de 2016

Zootrópolis


A modo de introducción, os diré que el cine de animación desde que entró la productora Pixar ha dado un vuelco insospechado. Si bien es cierto que durante la época dorada de Walt Disney se realizaron las mejores películas de animación de la historia, quizás durante las décadas de los ochenta y noventa, este género cosechó demasiadas irregularidades.

En mi opinión el gran salto se produce en la película Shrek, con un cine totalmente irreverente y que gusta tanto a padres como a niños. Para mí, la cima de estas obras se consiguió el pasado año con la obra maestra Inside Out con dos tramas superpuestas. Es decir, una trama desenfadada al gusto de los mas pequeños y otra que consigue hablar sobre el funcionamiento cerebral que involucra a los adultos. 

En Zootrópolis, se abunda en la misma linea anteriormente expuesta. La cinta cuenta la historia de una coneja que sueña con ser policía en una ciudad en la que solo conviven animales. Allí encuentra la ayuda de un un zorro resabiado con el que logra entablar una bonita amistad.

Durante el desarrollo de la película se produce un homenaje a El Padrino, que hace disfrutar tanto a niños como a los adultos. Otra escena con un alarde de gracia infinita se produce mediante una ácida crítica a la burocracia. Ésta es representada a través de los animales conocidos con el nombre de los perezosos por la lentitud de sus movimientos. 

Si algún pero hay que poner a Zootrópolis, este sería que le falta un puntito de chispa para conseguir ser sobresaliente, pero la recomiendo activamente. Ademas pienso que el cine de animación es un excelente vehículo de entrada para introducir a los mas pequeños en el mundo del cine.

Nota: 8/10.


lunes, 15 de febrero de 2016

La quinta ola


Película de doble genero. En primer lugar ciencia-ficción y en segundo lugar habría que hablar quizás de un subgénero que es el cine hecho para un público adolescente. El director británico J.Blakeson se esfuerza en cuidar al detalle cada plano de la cinta. Personalmente el género de la ciencia-ficción es uno de mis preferidos y si está bien tratado es muy emocionante pues nos presenta situaciones a las que la humanidad nunca se ha enfrentado.

En este caso la pregunta inicial de la película es fascinante: ¿Qué haríamos si una mañana al despertar y mirar por la ventana, nos encontráramos ante una gigantesca nave espacial de origen extraterrestre encima de nuestras cabezas?

Temor y curiosidad a lo desconocido seria la respuesta mas sencilla, pero el pánico y el instinto de supervivencia seria la respuesta más probable. Partiendo de esta base, en los primeros minutos ya quedamos enganchados para ver el desarrollo de la filmación. La presentación de los personajes y de la trama están bien conseguidos siendo los primeros 30 minutos de la película muy vibrantes.

Quizás a partir de la presentación de personajes, premisa, y situaciones, ya nos encontramos con un cine un poco más blando y dirigido especialmente hacia el público adolescente.

La historia nos cuenta como una invasión extraterrestre trata de apropiarse de nuestro planeta para obtener nuestros recursos energéticos. Pero de lo que nos habla en realidad la historia es de la unión de la humanidad para defenderse de un ataque de esta tipo. En este caso no vale el dinero, nuestra posición social o nuestras filias y fobias personales. En un ataque de este calado hacia la humanidad, solo valdría el coraje, la inteligencia y la unidad de acción para tener unas mínimas posibilidades de que nuestra especie sobreviviera. 

En cuanto a las interpretaciones, nos encontramos con la joven actriz revelación Chloe Grace Moretz que carga a sus espaldas con todo el peso de la película en una buena actuación. En cuanto a Nick Robinson, otro joven actor y coprotagonista de la cinta, me resultó un tanto inexpresivo. 

En síntesis, La quinta ola me ha parecido una película entretenida dentro del cine palomitero. Su buena realización técnica, y su emocionante premisa de salida pesan más en positivo que sus carencias narrativas en la parte final. 

Nota: 6/10.

sábado, 6 de febrero de 2016

La gran apuesta


O la gran estafa que hicieron los grandes bancos y corporaciones, que dio lugar a la gran burbuja inmobiliaria que arruinó a millones de personas en Estados Unidos y en otros muchos países. Con este punto de partida, nos encontramos con una atractiva idea para una película que demuestra que desde Hollywood también se puede hacer cine de denuncia social.

El problema de La gran apuesta surge cuando una buena premisa no acaba de funcionar como apuesta dramatizada. La cinta no consigue involucrar al espectador con una narrativa que se convierte en un tratado sobre ingeniería financiera.

Se produce un abuso de los términos que se utilizan en los mercados financieros: Swaps, Warrants, Cfds, posiciones de venta en corto, seguros de cobertura para acciones y así podríamos segir casi hasta el infinito. Supongo que sería mucho más sencillo para el espectador explicar que los bancos engañaron a los ciudadanos a través de sus hipotecas tóxicas. Finalmente la realidad demostró que los mismos bancos sabían que antes o después estas hipotecas dejarían de pagarse, y que ellos serian rescatados con dinero público.

Las nacionalizaciones de los bancos en muchos países del mundo, incluyendo Estados Unidos, Inglaterra o España nos llevó paradójicamente a que el capitalismo recurriera a ideas socialdemocratas para salvar la economía. 

La gran apuesta en vez de centrarse en contar el drama de las familias, se recrea en como unos inversores se percatan de que el sistema está a punto de caer. Sin embargo, en la narrativa existen detalles muy cinematográficos. Un ejemplo está en la secuencia en la cual el personaje interpretado por Steve Carell baja a pie de calle para ver qué estaba pasando con la ciudadanía. Así es como se percata de que un ciudadano había puesto la hipoteca a nombre de su perro, o como una bailarina de streptease tenia tres pisos y dos chalets con estas hipotecas basura. Es en ese momento cuando se da cuenta que la burbuja inmobiliaria está a punto de estallar.

Con respecto a las interpretaciones cabe destacar a Christian Bale que es uno de los inversores en una espléndida interpretación. Brad Pitt está correcto en un papel secundario y Steve Carell no está demasiado acertado en su papel dramático. También es cierto que siendo un actor que procede de la comedia lo tiene más difícil para dar credibilidad a este tipo de personajes.

Recapitulando ya, La gran apuesta parte de una buena base pero la filmación no consigue emocionar y se pierde en un laberinto financiero de la que no consigue salir con buen pie.

Nota: 4/10.